Burn after reading marca el regreso de los sensacionales Hermanos Joel y Ethan Coen, una historia de conspiraciones, engaños morosos a la Woody Allen, espionaje, traiciones, paranoia, chantaje soborno y todo por una cirugía plástica.
Los Hermanos Coen están de regreso de pues de “Este no es lugar para viejos” de 2007, pero ahora con una cinta de que rompe con las clásica forma de ver el espionaje, absurda, con una visión muy partículas y original de plasmar este tipo de cine, con personajes un tanto tontos, en busca de un poco de acción terminan por crear un problema en el que involucran a Estados Unidos y Rusia, un conflicto que se les sale de las manos, que nadie entiende y que tal no tenía la importancia que creían.
Con las actuaciones de George Clooney, Brad Pitt, Frances McDormand y Tilda Swinton, Burn After Reading , narra cómo Ozzie Cox (Malkovich), un agente de la CIA alcohólico y aburrido, pierde sus memorias en manos de su ex esposa (Swinton), quien deja el disco en el gimnasio, en donde uno de los empleados, Chad Feldheimer (Pitt) y la dueña del gimnasio, Linda Litzke (McDormand) encuentran la información y tratan de sobornar a Cox, al mismo tiempo que un agente de la CIA, Harry Pfarrer (Clooney) se dedica a conocer mujeres por internet r y acostarse con la esposa de Cox, y sin saber se involucra en el conflicto.
Esta nueva producción de los Coen, que fue la encargada de inaugurar la 65 muestra de cine de Venecia, es una cinta imperdible, graciosa, con elementos inesperados, asida, buenas actuaciones, Burn After Reading una película que no se tiene que perder por ningún motivo. La calidad de los Coen lo garantiza.
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